30 gramos de oro pueden estirarse hasta formar un cable de 80km
La ductilidad del oro es su mayor virtud tecnológica: 30 gramos de ese metal pueden estirarse hasta formar un cable de 80 km de largo.
El oro se utiliza como adorno o para transacciones entre los hombres desde hace casi seis mil años. Desde ese entonces, el oro jamás ha dejado de suscitar codicia por su escasez, su belleza y sus propiedades físicas, que lo convierten en un metal excepcional: es resistente a la corrosión, no se oxida y no se destiñe (después de 3.500, la máscara de oro de Tutankamón aún brilla como el primer día).
Además, el oro posee una conductividad eléctrica excepcional (por eso se utiliza especialmente en electrónica). También es un metal muy dúctil (con una onza de oro –es decir, 30 gramos- se puede fabricar un cable de 8 Km. de largo). El oro es muy reflectante y absorbe muy poco los rayos infrarrojos. Y eso no es todo: goza de aceptación universal, de un gran valor por unidad de peso, es divisible, intercambiable, difícil de falsificar, fácil de reconocer, es escaso pero está presente en todo el planeta, es deseable y tiene un valor estable e intrínseco. Por todas esas características, el oro se ha convertido en el gran candidato para convertirse en moneda, o al menos en un valor refugio universalmente reconocido. Fue así como surgieron las primeras monedas de oro en Persia en el siglo VI antes de Cristo, a orillas del río Pactolo, en la época del Rey Creso.
Incluso si a partir de 1971 las monedas ya no se fabrican con oro, los principales bancos centrales siguen considerando el metal precioso como EL refugio por excelencia en caso de crisis, y siguen conservando decenas de miles de toneladas en forma de lingotes y monedas.
En la actualidad, el oro cotiza en las principales bolsas del mundo. Ya sea que nos encontremos en India, Rusia, China, el Medio Oriente, Europa o los EE.UU., siempre encontraremos a alguien para comprarle o venderle oro a un precio común en todo el planeta. ¡El oro es único!
Otros datos
Cuando los españoles llegaron a Perú en 1532, el imperio Inca poseía una de las cantidades más grandes de oro jamás reunidas. Después de que el rey Inca Atahuallpa fuera capturado por los conquistadores, ofreció como rescate una habitación de 6,6 x 5,5 m2 llena de oro, tan alta como él pudiera alcanzar.
La Mina La Mejicana es una mina aurífera ubicada en el Cerro Famatina (en General Belgrano) a 34 km de la ciudad de Chilecito en la provincia de La Rioja, Argentina. Para transportar la gran cantidad de mineral hacia Chilecito se construyó lo que para la época era una de las mayores obras de ingeniería del mundo, el Cablecarril, que fue terminado en 1905 con una longitud de 35 km y en la actualidad forma parte de los monumentos y lugares históricos de la Argentina.
Fuente: Lingoro
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